martes, 23 de agosto de 2011

Hay días que te quiero más que otros..

Y la vida es fluir...
No voy a obligarte a ver el mundo como yo lo veo, porque en realidad cualquiera se volvería loco, pero, me gustaría que comprendieses mis pensamientos, esos que cavilo durante horas, que me llevan a la rabia, a la inseguridad, y a perder parte de lo bueno que me ofrece la vida en este instante.
"No quiero perderte... no quiero que me dejes... no quiero que te vallas..."
Lo único que busco hoy en día, es poder dar paz a esos pensamientos, y disfrutar de mi vida tal y como el destino me la esta ofreciendo, dulce.
.
Y podría gritar al cielo infinitas veces, que ¡TE QUIERO!
Púes nunca me hubiera imaginado el poder enamorarme de ti, el regalo que me ofrece cada día el destino de poder quedarme contigo hasta que los besos cesen, hasta que el cielo estalle, o hasta que sea polvo.
Haces que me olvide absolutamente del tiempo, del espacio, del pasado...
pero como todo, hay días buenos y días malos, y hay días que te quiero más que otros.
Hoy en día la única rabia que puedo sentir es la de no poder verte hoy o mañana, de no amarte tan apasionadamente como el primer amor, de llorar de impotencia ante tanta felicidad, de que me aceptes tal y como soy, de subirme al cielo y bajarme con tanta delicadeza, de no darte las gracias todos los días de mi vida por aguantar todas mis ingenuidades e inseguridades, de darme la oportunidad de tener mi tiempo y mis amigas, de vestirme y amarme más que yo. Porque todo eso que me ofreces, es dulce, la adorada y dulce felicidad que llevaba tiempo buscando; Y como una idiota, solo busco que me ates a ti las 24 horas diarias que tu respires, porque para mí, felicidad, es estar a tu lado.


miércoles, 3 de agosto de 2011

Querer es poder. Poder es querer.

Dicen que a lo largo de nuestra vida tenemos dos grandes amores; uno con el que te casas o vives para siempre, puede que el padre o la madre de tus hijos, esa persona con la que consigues la compenetración máxima para estar el resto de tu vida junto a ella…
Y dicen que hay un segundo gran amor, una persona que perderéis siempre. Alguien con quien naciste conectado, tan conectado que las fuerzas de la química escapan a la razón y os impedirán, siempre, alcanzar un final feliz. Hasta que cierto día dejaréis de intentarlo. Os rendiréis y buscaréis a esa otra persona que acabaréis encontrando.
Pero os aseguro que no pasaréis una sola noche sin necesitar otro beso suyo, o tan siquiera discutir una vez más… Todos sabéis de qué estoy hablando, porque mientras estabais leyendo esto, os ha venido su nombre a la cabeza.
Os libraréis de él o de ella, dejaréis de sufrir, conseguiréis encontrar la paz (le sustituiréis por la calma), pero os aseguro que no pasará un día en que deseéis que estuviera aquí para perturbaros. Porque, a veces, se desprende más energía discutiendo con alguien a quien amas que haciendo el amor con alguien a quien aprecias.


CONTIGO SOY FELIZ